Lionel Messi siguió escribiendo historia en
letras de oro.
Cuando todos pensábamos que el gol 300 en Liga
lo iba a lograr de penal en aquella jugada contra el Celta. Leo y sus
compañeros sorprendieron al planeta fútbol con la jugada que terminó en gol de
Suarez y que le dio la vuelta al mundo en minutos.
Pero la pulga sabía que tendría otra
oportunidad pronto. Febrero 17 de 2016 Barcelona se desplazó a Gijón para
ponerse al día con su calendario. Y Lionel apareció en el equipo titular junto
a sus socios de la MSN.
Minuto 24: el Sporting aguantaba. El genio
recibió la pelota de Luis Suarez que pico al vacío buscando el pase. Pero los
planes del genio eran otros. Cortó hacia adentro y desde unos 22 metros envió
su latigazo. El gol 300 iba en camino. Iván Cuéllar se estiró lo más que pudo
pero el misil iba recostado al palo de su mano derecha. Nada pudo hacer: Golazo
y la historia quedaba escrita.
Ese día no se conformó y siguió de largo en su
conteo pues marcó el 301 gol que en ese momento le daba la victoria a su
Barcelona. Un equipo que le dio todo, cuando lo necesito y que hoy recoge
cosechas de futbol, goles y títulos.
Vale la pena recordar que su gol 200 en Liga lo
marco frente al Osasuna el 27 de enero de 2013 y el 100 frente al Almería en
Noviembre 20 de 2010.
El equipo que más lo ha sufrido es el Atlético
de Madrid pero Messi aún no ha terminado sus sentencias. Y seguramente que las
cifras de sus goles y de sus víctimas seguirán aumentando a medida que sus
esencias se sigan destapando dentro del terreno de juego.
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